Nuestra mente es increíble dotada de gran inteligencia y en nuestros pequeños podemos capacitarla a base de la repetición de las acciones que deseamos vayan aprendiendo.
El adulto, volviendo en el túnel del tiempo recordará momentos importantes de su infancia, entre ellos, las travesuras, los miedos, los sueños, el juego. Lo cual queda marcado en la vida de la persona. Entender al niño, es comprender sus necesidades. Los padres procuran de proveerlo, darle lo necesario para que viva y se desarrolle sanamente. Y es el juego una prioridad en el campo…