7 pasos para ejercitarse en la humildad
De todas las virtudes, la humildad puede considerarse una de las más difíciles de conseguir. Toda la literatura sobre el tema nos lo repite.
De todas las virtudes, la humildad puede considerarse una de las más difíciles de conseguir. Toda la literatura sobre el tema nos lo repite.
Para vivir hay que respirar, respirar aire puro, oxigenado. Si no, te ahogas, te asfixias.
Cuando San Juan Bosco tuvo el primero de sus 159 sueños proféticos, oyó que Jesucristo le decía: «Debes hacer a la gente una charla acerca de la fealdad del pecado».
Dicen los santos que hay que aprender a aceptar más el sufrimiento, puesto que por los frutos que da, es más provechoso para el alma que el placer. La oración es más sincera y humilde si nace de un corazón que sufre ya sea por el peso de sus pecados, ya sea porque es un corazón que sufre abandono y soledad, ya sea que es probado…
¿Es este el momento de la mujer? Durante tres días, filósofos, teólogos, médicos e historiadores reunidos en el Instituto Católico de Toulouse exploraron el misterio de la mujer en el tiempo de la humanidad
Poco después de su elección como Sucesor de Pedro, el Santo Padre Francisco decidió visitar Lampedusa, la isla italiana que recibe cada día cientos de migrantes que buscan un futuro mejor y que huyen de guerras y carestías: era el 8 de julio de 2013.
Ya sea que oremos una oración prefabricada, o una oración espontánea, lo importante es no hacerlo mecánicamente sino con el corazón.
Al final del año escolar, en muchos ambientes surgen las preguntas y las dudas sobre la evaluación de los escolares. Sobre todo cuando se trata de evaluar la materia relativa a la enseñanza religiosa. Son muchos los que se preguntan cómo se puede dar una nota a los alumnos que han cursado la asignatura de religión.
La necesidad del descanso y la serenidad es algo que viene pedido por la naturaleza humana. En las primeras páginas del Génesis se nos dice que: “cuando llegó el día séptimo Dios había terminado su obra, y descansó de todo lo que había hecho” (2,2). El mismo Jesús invitó a sus discípulos: “a un lugar solitario para descansar un poco. Porque eran tanto los que…
¡Me siento tan sola! ¿Cuántas veces me he aferrado a este pensamiento? ¿Cuántas veces me he auto-compadecido por no tener a alguien a mi lado?