San Luis María Griñón de Monfort.
«Antes de la Comunión… suplica a esta bondadosa Madre que te preste su corazón para recibir en él a su Hijo con sus propias disposiciones.» «En efecto, toda la perfección cristiana consiste: En querer ser santo: «El que quiera venirse conmigo» En abnegarse: «que reniegue de sí mismo» En padecer: «que cargue con su cruz» En obrar: «y me siga» (Amigos de la Cruz)