«Madre querida acógeme en tu regazo, 
cúbreme con tu manto protector
 y con ese dulce cariño 
que nos tienes a tus hijos 
aleja de mi las trampas del enemigo, 
e intercede intensamente 
para impedir que 
sus astucias me hagan caer. A tí me confío 
y en tu intercesión espero, amén.»

Comparte:

About Author