«Nos recogemos interiormente para ofrecer al Señor el viaje, y después de santiguarnos rezaremos:
– La Novenita de Confianza al Corazón de Jesús
– Ave María o Salve, a la Madre Santísima de la Luz
V/. ¡Oh fuente de resplandores, de la mar Estrella y guía!
R/. Danos tu luz Madre pía, a justos y pecadores.
V/. Señor san José
R/. Ruega por nosotros
V/. San Rafael Arcángel
R/. Ruega por nosotros
V/. Todo por Ti, Corazón Sacratísimo de Jesús.
R/. Así sea.»