Ave María.
¡Dios te salve, María! Te saludamos con el Ángel: Llena de gracia. El Señor está contigo. Te saludamos con Isabel: ¡Bendita tú entre las mujeres y bendito el fruto de tu vientre! ¡Feliz porque has creído a las promesas divinas! Te saludamos con las palabras del Evangelio: Feliz porque has escuchado la Palabra de Dios y la has cumplido. ¡Tú eres la llena de gracia!…