El tiempo, es una de las prioridades que hoy en día se debe retomar. En esta sociedad actual envuelta en un sinfín de actividades: trabajo, sociedad, distracción, amistades, escuela, familia; el tiempo se vuelve poco en comparación de todo lo que se tiene que hacer.
En la familia que es la base de la sociedad, que lucha por el sostenimiento, unidad y armonía de sus miembros, se debe tener presente la planificación del tiempo para el logro de los objetivos. Por ello una de las razones para hablar de este tema, es evitar las consecuencias que de la falta de tiempo se generan. Son varias las problemáticas que se van presentando en los miembros de la familia, por una mala administración del tiempo, y en los hijos recaen las consecuencias.
Es necesario reflexionar en cómo hacer una mejor administración de este grande tesoro y promover el mejor funcionamiento familiar.
Te recomendamos tener en cuenta los siguientes tips:
- Amar y valorar la familia. Y en relación a ella tomar las mejores decisiones que se consideren.
- Planificar el tiempo escolar de los hijos en momentos en que sea menor el tiempo que pasen solos o con los cuidadores.
- Organización de los padres para que sea uno u otro el que pueda estar al pendiente de los hijos en el hogar.
- Establecer un dialogo que favorezca los vínculos de confianza entre padres e hijos. Tomando un tiempo del día a día, para preguntar a los hijos cómo se encuentran, que tal les fue en sus labores. Platicar con ellos sobre sus actividades y estar atentos a las señales emocionales de la familia.
- Estando en casa, dejar a un lado las problemáticas relacionadas con el trabajo y enfocarse a los tiempos propicios con la familia.
- Hacer un esfuerzo porque en las comidas pueda estar alguno de los padres, si no es posible establecer un horario de cena para que este toda la familia completa.
- Los padres deben ser ejemplos de aprovechamiento del tiempo, tanto en sus actividades en el hogar y laborales. Manifestando a los hijos la importancia de no desperdiciar el tiempo, pero tener cuidado y nunca hacer sentir a los hijos como un estorbo. Dedicarle a ese hijo el tiempo que en su momento sea posible, pero de calidad.
- Establecer en unión con la familia un reglamento en base a las actividades que se realicen durante la semana y en los fines de semana, procurar que este reglamento sea respetado. Pues favorecerá la disciplina y la organización del tiempo.
- Organizar actividades diferentes los fines de semana, en las que los hijos tengan participación, tiempo de recreación y sana convivencia: paseos, salir a comer, o cenar en familia, practicar algún deporte, jugar juegos de mesa, acudir a los actos religiosos.
- Dar espacio a los hijos para la recreación con sus amistades, pero que se establezcan tiempos y límites, para la convivencia familiar. En una organización acordada con la familia.
- Cuando por alguna causa grave o delicada, se tenga que modificar alguna de las reglas de familia. Hacerle saber a los hijos, pedir su comprensión y reparar en cuanto sea posible, el tiempo que no se pudo emplear en esos momentos para la convivencia familiar.
- El tiempo que se dé a la familia debe ser de calidad, procurar que no intervengan los medios de comunicación moderna en la convivencia familiar, como: hacer uso del internet en los momentos que son de la familia, prender la televisión en los espacios de las comidas, estar en redes sociales frecuentemente con el celular y no prestar la atención debida a los hijos.
- Darse espacios ya sea uno u otro padre, para acudir a las actividades que se realicen en las escuelas, como día del padre, festival del día de las madres. Hacer que sus hijos sientan la presencia y el apoyo.
El tiempo que se tiene en la vida es corto, por ello sacar de él máximo provecho y que mejor con la familia, pues de esa dedicación dependerá en mucho el futuro de los hijos.
Lic. Emma Monjaraz Anguiano